jueves, 18 de marzo de 2010

Muerte abarrancada

El Monte de Torrero recupera el Barranco de la Muerte como espacio ciudadano. Esta zona ha sido durante mucho tiempo muy maltratada por los humanos, con vertidos de residuos malos.

Entre 2001 y 2006 se ejecutaron operaciones para mejorar el pinar, y labores para frenar la erosión causada por lluvias, escorrentías, y estracción de los famosos Adoquines del Pilar .
La gran intervención hidrológica forestal se ha producido en el Barranco de la Muerte, porque las actuaciones urbanísticas más cercanas, y la realización de las infraestructuras que nos han hecho famosos, estaban afectando directamente, de forma inexplicable, de forma negativa.

El barranco puede alcanzar un caudal tremendo: 17,83 m3/seg. De hecho, ha tenido dos grandes avenidas en los últimos seis años que hacían prever una catástrofe urbana de proporciones cartaginesas: ni más ni menos, que el potencial arrastre de cadáveres del cercano cementerio hasta la mismísima plaza de España. Para evitarlo, en 2007 se inició la intervención: un depósito semienterrado fue semiconstruido con semicapacidad para semialmacenar 2.403 semim3 de semiagua para semiriego; un lago artificial de 1.000 m2 con andadores, pérgolas, nueve farolas con sus correspondientes nueve células solares fotovoltaicas, 25 bancadas para sentarse, arrecostarse o comerse un bocadillo de tortilla de patatas, papeleras (no hay ceniceros) una fuente de agua, y 85 árboles de diferentes especies. Todo para prevenir al invasión de los cadáveres marineros. En el cauce del barranco se han acondicionado caminos y se han construido dos diques formados por gaviones transitables para frenar la velocidad del agua y laminarla, como los hojaldres mil hojas tan ricos que hacen en Daroca.

Se ha definido el cauce del barranco y se ha creado un canal que garantiza presencia constante de agua a lo largo de todo su recorrido. La energía para impulsar la recirculación del agua del canal se produce con 18 módulos fotovoltaicos, integrados en la pérgola de la plaza Central, y con un transformador que garantiza las necesidades del sistema, aunque queda bastante feo por estar en medio. Sobre este canal se han instalado 4 pasarelas, que convierten el entorno en espacio apropiado para el uso ciudadano, o no.

Se han habilitado 29 nuevos sectores de riego con más de 4.500 metros de tuberías. Una parte del sistema es por aspersión, para mantener una pradera de 19.921 m2 complementada con especies arbóreas y arbustivas. Hay también riego por goteo, el famoso sistema chino que asegura una mayor variedad de especies. Se han construido 20 bancos de gavión para compensar la temporal falta de sucursales cercanas.

En 2009 se han plantado ejemplares de pino carrasco, sabina albar y encinas, además de arbustos como sabina negral, coscoja, lentisco, espino negro olivilla, ginesta y romero. Toda una orgiástica condimentadora. Se han reparado los firmes de algunos caminos, eliminado vegetación espontánea, instalado nuevo mobiliario, así como juegos infantiles (casa de juegos, caballo móvil, no como el de la parte de atrás de la Lonja, tirolina de 50 m., carrusel y tronco saltarín) en la Plaza Central, y un circuito deportivo para la tercera edad semoviente a lo largo del barranco. Los que lleguen hasta allí andando desde Parque Goya II, aunque luego no hagan nada, ya les vale por una ronda en todos los aparatos.

En 2010 se terminará la restauración de unos de los enclaves naturales más tradicionales, queridos, y desconocidos de la ciudad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El tema es que unas cooperativas del palitroque han construido en un cauce fluvial(Dominio Publico hidráulico),como en cuarte,arcosur,valdespartera(zona de servidumbre del pasillo aereo) y ahora va papá estado y se gasta los jurdeles:nuestros dineros.
No pasa nada.
Buen rollo.